Etapa 6: Refugi Bassegoda - Beget

Me despierto a las 6. Bueno, lo de despertarse es por decir algo, sería mejor decir "me incorporo", porque ya estaba despierto. La verdad, no se cuánto he dormido, pero creo que no mucho. Ha sido una noche muy muy larga, la cama estaba muy dura y al no tener ni esterilla ni aislante he estado toda la noche dando vueltas buscando una posición en la que no me doliera todo, y no la he encontrado.

En fin, ya ha pasado, hay que mirar adelante. Desayuno cosas que llevaba en la mochila y que compré anteayer en Maçanet y comienzo a andar a las 6:45. Comienza el camino con un fuerte desnivel de 300 metros, pero como estoy fresco lo hago bien. Supero por primera vez en la travesía la cota 1000m, la cosa comienza a ponerse interesante.

Hacia el Bassegoda

Bajando a Sant Aniol d'Aguja

La piedra no está pintada de verde, es musgo

A continuación una larga bajada de 800 metros por dentro del bosque. No es difícil, pero debido a la tormenta de ayer el suelo está muy resbaladizo. Un par de horas, 7 kilómetros y 3 resbalones (uno con rascada en el codo incluida) llego a Sant Aniol d'Aguja. Junto a la ermita están construyendo un refugio.

Sant Aniol

A continuación otra subidita resbaladiza (ya veo que toda la etapa será así) e incluso en algún momento que no hay que descuidarse. El sendero sube justo al lado de un vertiginoso cortado que cae hasta el río, que se ve muy abajo. En un punto incluso hay cadenas para pasar más seguro.

El cortado desde el sendero

Curioso refuerzo del sendero en forma de arco de puente

Llego al Coll de Talaixà. Mientras descanso me parece ver un animal desaparecer entre los matorrales. Voy hacia donde lo he visto y, naturalmente, no veo nada. Pero al volver a la mochila, sale de detrás de un arbusto un pequeño zorro. No parece tener miedo, se acerca poco a poco hasta que casi lo puedo tocar. Debe estar acostumbrado a la presencia humana, o bien está muy hambriento, porque hace amago de acercarse a la mochila. Lamentablemente, creo que ni los frutos secos ni las galletas Príncipe que llevo le gustarían, así que le saco unas fotos y continúo (con un poquito de pena).

El zorro

La foto está hecha sin zoom

A partir de aquí, un par más de sube-bajas resbaladizos y a las 2 estoy en Beget. Hubiera podido llegar media hora antes si no hubiera sido por un punto donde he ido por el camino equivocado (la señal estaba muy mal puesta, no se veía a simple vista, lo juro), y porque en una parada he olvidado la gorra en un árbol y he tenido que volver a buscarla.

Llegando a Beget

Dicen que Beget es uno de los pueblos más bonitos de Catalunya. Es posible, la verdad es que es muy pequeño pero con callecitas empedradas, su río, su puente y su iglesia románica, que es de las más importantes.

¿ Es bonito o no ?

Hago el check-in donde dormiré y voy a comer en uno de los dos restaurantes del pueblo (el que en la puerta decía que tenía WiFi). No pongo la foto de lo que he comido para no dar envidia.

Una vez comido, compro unas galletas y barritas para mañana, y viendo que la iglesia está abierta, pago la entrada para visitarla, para añadir algo de cultura a la ruta. Por lo visto consiguió salvarse de la quema durante la guerra civil, y el retablo que se conserva es de lo mejorcito que hay.

El retablo

Vista de la iglesia

Vuelvo a la casa y al lavar la ropa me doy cuenta que olvidé el jabón en alguna parte, así que lavaremos solo con agua (no le viene de aquí). Además, parece que el cargador del móvil se ha estropeado. Esto si que es algo serio. Pediré a los dueños el suyo y espero poder comprar uno en Setcases mañana.

Así que mejor no hago nada más. Espero que sea la hora de cenar, y a dormir pronto en una cama blandita.

Breve informe de daños: la ampolla ya casi es historia, así como el eczema de la espalda. La rodilla sigue molestando (no llega a dolor) y ha aparecido un dolor nuevo en el talón del pié izquierdo. A ver mañana.

Y como parece que todavía aguanto: